Haga como yo, no se meta en política

Dice el Conselleiro de Educación que las movilizaciones en contra de los recortes educativos y la nueva ley del PP son políticas. Y es verdad. Es política defender la enseñanza o la sanidad públicas y es desarrollar otra política aumentar las subvenciones a los centros de enseñanza y hospitales privados. Todo es política y diferentes políticas dan lugar a sociedades distintas, más o menos justas. El desprestigio de la política se produce por los malos políticos. Los que sirven intereses diferentes a los de los votantes, los que no creen en la democracia. Cambalaches como el que hemos vivido estos días en Cambre no ayudan, desde lueg,o a restaurar la imagen de la democracia y la política que busca defender al débil y buscar soluciones comunes a los problemas. La verdadera política no acepta boicots de los poderes económicos es transparente y útil. Se consigue con más control y más democracia. El problema es que los ciudadanos han interiorado que politizar, hacer política. es malo. Y aplican la receta de Franco. Usted haga como yo, no se meta en política. Ya sabemos cual es la consecuencia. Convendrán conmigo en que no es esa la alternativa.

El último discurso de Franco se celebró el 1 de octubre de 1975 en la Plaza de Oriente. Así lo contaba el Nodo.