viernes, 1 de agosto de 2014

Vacaciones y asignaturas pendientes




Desperezándose llega el verano. Y algunos desconectamos con unas vacaciones, una quimera para muchos por las que hubo luchas de las que nos habíamos olvidado. Como aquellas ocho horas de trabajo, ocho de ocio y ocho de descanso. Es el momento de plantearse de nuevo cómo vamos a organizarnos. Para poder trabajar, poder descansar y poder consumir. Esto último fundamental si queremos volver a coger el pulso económico con fuerza. Y hay que plantearse ese debate, que es un debate de altura y debe realizarse con las cartas boca arriba. Hay que decidir si queremos promover un marco social de ciudadanos que, si lo pensamos desde el punto de vista económico, serían también consumidores o de una masa de población dependiente de la caridad. Reparto de trabajo o reparto de ayuda. Porque de esta crisis podemos salir igualando por abajo, dejando sobrevolar la realidad a una minoría de privilegiados o intentando promover de nuevo el bienestar general para que el movimiento económico beneficie a la mayoría. Porque hay suficiente para todos. Eso es lo impresionante. Habrá que ponerse en septiembre, sin dejar de atender las urgencias.

Luz Casal inaugura hoy las fiestas de María Pita.