15 mil personas son ya socios del Deportivo para la próxima temporada. Han depositado su dinero, del orden de más de dos millones de euros en conjunto, con el propósito de animar a su equipo en Segunda División. Estos días raros se está librando en los despachos, y fuera de los despachos por cierto, una batalla sin par en la que se juega el futuro de una Institución de más de un centenar de años. Mañana miércoles 31 de julio es la fecha tope, el día clave para salvar o dar al traste con esa historia y con la intención de mantener un club de fútbol expresada, pasara lo que pasara, por 15 mil personas y por otras miles que están esperando para poder dar el paso. Si con esa masa social y esa historia detrás los responsables del desaguisado, que son varios y casi todos tienen que ponerse de acuerdo mirándose a la cara, no consiguen un acuerdo al margen de factores externos probarán definitivamente que no hay asunto o cuestión en que pueda haber consenso ni futuro. Porque cuestiones como la supervivencia del Dépor surgen de abajo a arriba y la energía que suscitan no han podido pararla ni los más poderosos durante años. Al final propios y extraños pueden quedarse con un frágil botín, la nada.
Manuel Pablo actuaba ayer como portavoz de la plantilla, en su condición de capitán actual, acompañado de todos los demás. Aseguran los jugadores que no irán a Portugal mañana si no cobran. El canal de la liga le hacía esta entrevista hace tres meses.
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