Es esa niña de doce años la prioridad de todos. Debería serlo. No son ellos y nosotros. Somos todos. Que Ikalase se quedara a las puertas de su colegio el día de recogida de notas con su velo islámico, el día más importante del año después del día del inicio del curso es una vergüenza. El día de la fiesta final. Con velo o sin velo demuestra que tenemos mucho que aprender y sobre todo que hay mucho que priorizar y que la integración de una niña que luego crecerá, y esperemos se quite el velo por propia voluntad, debe ser la prioridad. Vivimos en un lugar del mundo en que el hecho de que una niña no pueda asistir a una fiesta de fin de curso ni pueda recoger unas notas es importante. Ese es el estado de bienestar que hemos conseguido. Esa debe ser nuestra prioridad. Mantenerlo.
Los defendores del velo colgaron además este vídeo en you tube. Un vídeo de parte, por supuesto, pero un vídeo que nos interroga...
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