Ha pasado otro primero de mayo y en las calles miles de personas han recordado aquel lema, 8 horas de trabajo, 8 horas de recreo, 8 horas de descanso. No estaban todos pero pedían para ellos y para los demás. En coincidencia con las movilizaciones el Presidente del Consello Galego de Relacións Laborais, Demetrio Fernández, nombrado por la Xunta de Feijóo decía en la entrevista de la SER que la legislación laboral no debe ser utilizada como vehículo para solucionar los problemas económicos, que las causas y el inicio de la crisis no están en el mercado de trabajo y que las reformas laborales que se han puesto en marcha en los últimos años no han ayudado en nada. Hay que recordar que mientras no haya trabajo y mejoren los sueldos y las condiciones de los que siguen trabajando no se puede recuperar una economía tan debilitada como la nuestra. Lo sabe cualquier niño que aprenda la teoría del trueque y del cambio. Lo demás son excusas que siguen beneficiando solamente a los especuladores, no a los empresarios que viven de crear algo cada día ni a sus trabajadores. Aquí, en Francia, donde comienzan a aplicarse los recortes con los mismos argumentos que aquí, o en Tombuctú.

Ilustres Ignorantes. La crisis.