Los resultados de las elecciones europeas parecen llevar en volandas un mandato: Que corra el aire. Pero que corra de verdad. No ya por cambio de caras, si no por cambios de esquemas, cambio de lecturas, cambio de recetas. Las europeas son esas elecciones en las que la ciudadanía se atreve a hacer experimentos. Como el poder está más lejos, parece que son menos importantes. Aunque en realidad es en Europa donde está el poder. Y en los despachos de metros y metros cuadrados. Los resultados de las europeas demuestran que los ciudadanos no renuncian a la política si no a cierta política practicada por los grandes. La que dice A y hace B. La que no responde a la soberanía de los que eligen si no que se escuda en aquel famoso todo para el pueblo pero sin el pueblo. En el aire está si estos resultados tendrán continuidad clara pero indican una tendencia. Para los que votaron y los que se quedaron en casa a sabiendas. Los resultados de las europeas, en A Coruña y Galicia también, han sido una reacción de una sociedad más sana de lo que parecía desde el punto de vista político que manda un aviso contundente. Hay alguien ahí?
El anuncio de convocatoria extraordinaria de Cingreso del PSOE y abandono de Rubalcaba contado por La Sexta.
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