Se ha celebrado ese referéndum simbólico e imposible en Cataluña. Y lo mejor de ese 9 N es que abre la posibilidad de hacernos preguntas. La capacidad de preguntarse cosas a sí mismo y a los demás es la que produce el avance del ser humano. Igual que la posibilidad de votar es condición indispensable para que exista la democracia. Ha pasado el 9N sin tanques ni disturbios. Aquí en Galicia con ciudadanos contemplando lo que pasó ayer sin sentirse afectados ni concernidos y otros espectantes a favor y en contra. En Escocia se celebró un referéndum hace unos meses con la colaboración del gobierno inglés, en Cataluña no ha podido ser con la Constitución en la mano. Había un pacto territorial en España y una parte de la población se quiere descolgar invocando al derecho a su soberanía. Eso abre un espacio para las preguntas ¿Sirven las leyes actuales si cambia el escenario? Le importa a Galicia lo que pase en ese brete? Nos sentimos ofendidos, concernidos o ajenos ante lo que pasó ayer? Es bueno pensar, para entender, para rechazar, para ser.
La visión del proceso en los días previos en Polónia. Programa de humor de la Televisión Pública catalana.
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