Los más gallegos de los empresarios gallegos han denunciado a Novagalicia Banco y al FROB, por tanto al Banco de España, por la pérdida de los 70 millones que invirtieron para dar un matiz de galleguidad al banco que surgió de la fusión de las cajas de ahorro. 70 millones que se esfumaron, como la participación del 6 por ciento de la obra social, ante la inyección de dinero europeo para tapar los socavones de la gestión anterior. Dicen los afectados que el Banco de Espña y NCG les aseguraron que la entidad surgida de la fusión era viable y solvente y que nadie les informó de los cambios de situación, exigencias y legislación que acabaron con su desaparición. Podría decirse que pecaron de ingenuidad, como muchos otros, porque todos queríamos que saliera adelante el proyecto. Lo cierto es que el diseño ya estaba realizado. Y la única entidad quebrada que podía sobrevivir como negocio vinculado a un territorio era Bankia, la antigua Caja Madrid. Los empresarios son víctimas de la misma quiebra de confianza que padecieron muchos de los pequeños clientes de las dos entidades, con una diferencia, su aportación, con la perspectiva honorable de hacer negocio, es de suponer, no afectaba a su supervivencia material. A personas como los preferentistas les tocaron en las cosas de comer.
Reportaje de la TVG, "O futuro de Novagalicia Banco". Emitido el 17 de Diciembre de 2012. Está bien repasar las cosas que han pasado dos años después.
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