Ha sido un fin de semana de aterrizaje forzoso y estupor. Ante el calado de las medidas anunciadas por el gobierno. El "que se jodan" alcanza todo su significado cuando se comprueba la dirección de los recortes y a quien afectan. Si se hubiera hecho de una forma distinta la campaña para hacer aflorar el fraude fiscal, si hubiera habido alguna medida para que las rentas altas paguen impuestos en la misma medida en que los paga el que depende de una nómina, el recorte hubiera sido igual brutal, pero la sensación sería que aquí pagamos todos. En realidad, además, un recorte tan profundo no hubiera sido necesario. El problema es la diferente vara de medir y ese camino hacia ninguna parte. Se perjudica al funcionario, a los servicios públicos, al pequeño comercio, al jubilado, al estudiante y se recupera el “que inventen ellos”. Y lo peor es que con esas medidas es imposible salir. Lo era hace tres años y ahora, con las mismas recetas, es más de lo mismo y peor. Así no.
Cristóbal Montoro dijo que no llegaba para hacer recortes si no reformas. Vivimos un tiempo de intentos continuos de subversión del lenguaje y, por tanto, del pensamiento.
Tienes toda la razón Consuelo. Resulta que lo de los bancos no era un rescate y ahora desde el Bundesbank nos piden "que ampliemos el rescate", nos dicen que no son recortes, sino reformas,... Intentan engañarnos con juegos de palabras que ya no dejan indiferente a nadie y enfadan.
ResponderEliminarEstoy contigo cuando propones vigilar el fraude fiscal, pero no sólo de las rentas bajas, sino también de las altas. Estoy contigo cuando apoyas un aumento de impuestos también para las rentas altas y añado que también sería necesario extinguir los derechos ilegítimos y el fraude por parte de los políticos (gastos por desplazamientos y vivienda, dietas, coches oficiales para asuntos propios, etc).
Por otro lado, creo que deberíamos exigir al gobierno que inhabilitara a todos los políticos que estén involucrados en juicios por malversación de fondos y otros delitos. Con los corruptos tolerancia 0.
es que, qué bonito, lo último que nos faltaba por oír.
ResponderEliminarUn saludo para el blog.